Translate

sábado, 25 de diciembre de 2021

LA BIBLIA / EL CORÁN

Hace mucho tiempo, en la misma zona, aparecieron el judaísmo, el cristianismo y el islamismo.

¿Qué une a las tres religiones?
Las tres parten de un fenómeno de Revelación: las tres creen en la Unicidad de Dios, las tres nacen en un ambiente mayoritariamente politeísta; y en las tres ha habido un desarrollo teológico a lo largo de los siglos. Son, por otro lado, tres religiones semíticas, las más importantes del mundo actual, porque nacieron en un contexto semítico y en lenguas semíticas, aunque el judaísmo del tiempo de Jesús estaba fuertemente influido por la cultura helenística.

Las tres religiones tienen mucho en común pero cada característica que las une posee matices que las ha ido separando a lo largo del tiempo.
En el judaísmo la revelación se realiza a través de Moisés. En el cristianismo se realiza a través de Jesús y en el islamismo, llega a través de un único profeta: Mahoma.

Judíos y musulmanes respetan la figura de la Virgen María aunque no acepten el hecho de que concibió "por obra del Espíritu santo" a Jesús, a quien sin embargo aceptan como profeta.
El judaísmo espera todavía la llegada del Mesías y el islamismo considera a Mahoma el último profeta y a su Revelación, la que cierra las dos anteriores.

¿Cómo nacieron las biblias actuales?
Fue en el año 1200 antes de nuestra Era cuando el rey David comenzó a unir los textos existentes en las diferentes tribus hebreas. Nacieron así los primeros textos bíblicos o de la Tora. Pero los hebreos de Jerusalén, cuyo culto se desarrollaba alrededor del Templo de Salomón, fueron expulsados por la conquista babilónica y su templo destruido por Nabucodonosor.
La etapa del exilio babilónico fue decisiva para la redacción de muchos libros bíblicos.
Cuando los judíos retornan a Jerusalén construyen un segundo templo, que será arrasado en el sigo I de nuestra Era por los romanos. Entonces nació el judaísmo tal y como lo conocemos hoy, alrededor de la sinagoga y del Libro, pues ya no tenían templo. Cuando esto sucedió, Jesús ya había nacido, el cristianismo comenzaba a extenderse y la diáspora judía (o exilio) se expandía por el mundo.

El Nuevo Testamento y el Corán siguieron desarrollos distintos. El primero pasa a formar parte de la Biblia cristiana, en la que se incluye a la hebrea, denominada por los cristianos Antiguo Testamento; y el Corán -en un principio al igual que las otras dos religiones, transmitido oralmente- comienza a ponerse por escrito siguiendo un orden práctico, a través de sus distintos capítulos o suras.

Por su parte, el judaísmo ha desarrollado el Talmud, libro en el que se analizan y se interpretan los textos de la Tora y también ha desarrollado la Cábala, libro esotérico que estudia el alfabeto hebreo y sus significados secretos.

LOS PERSONAJES
* La Biblia, el Corán y el Nuevo Testamento comparten a los profetas Moisés, Abraham, Isaac, Jesús y otros muchos.

* Jesús es un profeta para el judaísmo y el islamismo y el Mesías para el cristianismo.

* El Mesías no ha llegado para el judaísmo. Para el islamismo no hay más Mesías que Mahoma, ni más revelación que la suya, que cierra las dos anteriores de Moisés y de Jesús.

*En el Corán a Abraham se le llama primer musulmán, que construyó la Kaaba en la Meca. Judíos y musulmanes remontan sus linajes a Abraham.

*Jesús no muere en la cruz para los musulmanes. Alá lo salva y lo lleva al cielo.

Programa 34 ABRAHAM, EL PADRE DE TODOS LOS CREYENTES (Historias de ...√ Diferencia entre Mahoma y Jesús | 【SOLUCIÓN】


DIFERENCIAS DE LENGUAJE Y DE ESTRUCTURA
* La Biblia fue escrita en hebreo, el Nuevo Testamento en griego y el Corán fue revelado y escrito en árabe.

* La Biblia es lectura. El Corán es una recitación.

* La Tora, parte de la Biblia hebrea, comenzó a escribirse en el año 1200 antes de nuestra Era. Se desconoce por quién, pero hay teorías que afirman que El Cantar de los Cantares es de una mujer.

* El Nuevo Testamento (salvo las cartas pastorales y la de Judas, del siglo II) estaba escrito en el siglo I. Si fueron Mateo, Marcos, Lucas y Juan quienes redactaron los evangelios o fueron meros compiladores, o si es posible identificar a los autores del resto, es irrelevante para la historia del texto. Los primeros copistas del Nuevos Testamento no querían hacer literatura sino transmitir un mensaje.

* El Corán fue redactado por los discípulos de Mahoma inmediatamente después de su muerte en el año 623.

* La Biblia está estructurada en libros y capítulos.

* El Corán se organiza en suras o capítulos, compuestos por un número indeterminado de versos o aleyas, de la voz árabe Aya, que significa signo. Cada aleya o verso es un signo de la divinidad.

* Las suras se ordenan de mayor a menor, menos la primera que es muy breve. Las más largas son consideradas como la revelación que Mahoma recibió en Medina, son más discursivas y establecen normas de conducta. Las más cortas (la revelación que Mahoma recibió en La Meca) son exhortaciones y definiciones de la divinidad. Su impacto es mayor y son bellísimas en la recitación. Las suras están ordenadas prácticamente y no cronológicamente.

* En el Corán hay más descripciones del paraíso que en la Biblia. Los expertos explican que esto se debe a que el islamismo entiende el mundo real y la naturaleza como milagros de Dios, y ambos forman el paraíso en el Corán.

La Biblia CristianaNueve grandes beneficios de leer y reflexionar sobre el Corán ...


DOGMAS, RITOS Y LITURGIAS
* Sólo el cristianismo admite la Santísima Trinidad.

* La Virgen María es aceptada por el judaísmo y el islamismo como figura importante y venerada, pero no aceptan que concibiera por obra y gracia del Espíritu Santo a Jesús. Para el islam es inaceptable que Dios pueda reencarnarse y no se puede representar.

*Judaísmo e islamismo se aglutinan en torno a un libro sagrado; el cristianismo, además, se aglutina en torno a una persona, Jesús.

* Los dogmas musulmanes y judíos son más sencillos que los cristianos, pero poseen más tabúes alimenticios (no comer carne de cerdo, válido para ambas religiones, o no beber alcohol, válido sólo para los musulmanes). El cristianismo primitivo no tiene esos tabúes.

*Islamismo, judaísmo y cristianismo poseen diferentes liturgias como el Sabbath, el domingo y el Ramadán.

* El judaísmo y el islamismo no tienen una iglesia. El judaísmo tiene sus sinagogas y sus rabinos, uno para cada sinagoga. El islamismo tiene sus imanes, sus mulás y sus musties, los tres responsables más importantes de la enseñanza del Corán, así como los mayores expertos en su Derecho canónico.

* La usura está completamente prohibida en el Corán, algo que no sucede en la Biblia, aunque si en el Nuevo Testamento.

martes, 21 de diciembre de 2021

BENDICIÓN EN LA MESA DE NOCHEBUENA

Bendice, Señor, nuestra mesa.

Por una noche al menos,

quisiéramos que el mundo fuera una gran familia:

sin guerras, sin miseria, sin hambre, sin dolor...

y con algo más de música y de justicia.




Bendice los alimentos 

que en su honor vamos a compartir.

Bendícenos a cada uno con tu Amor,

que fue tan grande, que quisiste compartir con

nosotros este mundo:

a veces tan maravilloso y otras veces tan difícil.




Bendice a quienes quisiéramos que estuviesen aquí

en esta noche tan santa: a los que están lejos...

a los que partieron hacia tu Casa.





Que este hogar, Jesús,

acoja tu palabra de amor

y de perdón

y siempre estés tú presente.

Consérvanos unidos.




Danos durante todo el año paz y trabajo.

Danos fuerzas para ser personas justas,

comprensivas, entrañables, comprometidas

por un mundo mejor.

Así habrá muchas "noches-buenas"

y "días buenos".




Eres bienvenido, Señor, siempre a esta casa. 


martes, 7 de diciembre de 2021

OFERTAS DE EMPLEO

 Empresa de "Belenes vivientes" busca:

PERSONAS PASTORES: que, a pesar de que estén mal vistas a los ojos de las "personas de bien", sepan superar el conformismo, las dudas o el miedo al fracaso.

PERSONAS ESTRELLAS: que iluminen, que estén siempre presentes en las encrucijadas de los caminos, dispuestas a dar claridad y consuelo.

PERSONAS ÁNGELES: que comuniquen las grandes noticias de cada día, no los chismorreos que, en el 90% de los casos, se utilizan para hablar mal del otro.

PERSONAS PESEBRES: que estén siempre dispuestas a ofrecer lo que tengan. Que sus corazones estén abiertos de par en par, abiertos a cualquiera que necesite entrar en ellas.

PERSONAS MAGOS: que se dejen contagiar por la magia de Dios y estén siempre dispuestas a abrir sus cofres y ofrecer lo más valioso que poseen: amor a raudales.

PERSONAS BEBÉS: que durante estas Navidades se conviertan en niños, indefensos, transparente y limpios para que sientan en sus propias carnes cómo el Dios-Bebé va a requerir de nuestra ayuda.




martes, 30 de noviembre de 2021

CARTA DE JESÚS

 Querido Amigo:

Como sabrás, nos estamos acercando otra vez a la fecha en que festejan mi nacimiento.

El año pasado hicieron una gran fiesta en mi honor y me da la impresión que este año ocurrirá lo mismo. A fin de cuentas ¡llevan meses haciendo compras para la ocasión y casi todos los días han salido anuncios y avisos sobre lo poco que falta para que llegue!

La verdad es que se pasan de la raya, pero es agradable saber que por lo menos un día del año piensan en mi. Ha transcurrido ya mucho tiempo cuando comprendían y agradecían de corazón lo mucho que hice por toda la humanidad.

Pero hoy en día, da la impresión de que la mayoría de la gente apenas si sabe por qué motivo se celebra mi cumpleaños.

Por otra parte, me gusta que la gente se reúna y lo pase bien y me alegra sobre todo que los niños se diviertan tanto, pero aún así, crea que la mayor parte no sabe bien de qué se trata. ¿No te parece?

Como lo que sucedió, por ejemplo, el año pasado: al llegar el día de mi cumpleaños, hicieron unas gran fiesta pero... ¿Puedes creer que ni siquiera me invitaron? ¡Imagínate! ¡Yo era el invitado de honor! ¡Pues se olvidaron por completo de mi!

Resulta que habían estado preparándose para las fiestas durante dos meses y cuando llegó el gran día me dejaron al margen. Ya me ha pasado tantísimas veces que lo cierto es que no me sorprendió.

Aunque no  me invitaron, se me ocurrió colarme sin hacer ruido. Entré y me quedé en mi rincón. ¿Te imaginas que nadie advirtió siquiera mi presencia, ni se dieron cuenta de que yo estaba allí?

Estaban todos bebiendo, riendo y pasándolo en grande cuando de pronto ser presentó un hombre gordo vestido de rojo y barba blanco postiza gritando: "Jo, jo, jo".

Parecía que había bebido más de la cuenta, pero se las arregló para avanzar a tropezones entre los presentes mientras todos los felicitaban.

Cuando se sentó en un gran sillón todos los niños, emocionadísimos, se le acercaron corriendo y diciendo: ¡Santa Claus! ¡Como si él hubiera sido el homenajeado y toda la fiesta fuera en su honor!

Aguanté aquella "fiesta" hasta donde pude pero al final tuve que irme. Caminando por la calle me sentí solitario y triste. Lo que más me asombra de cómo celebra la mayoría de la gente el día de mi cumpleaños es que en vez de hacerme regalos a mí, ¡se obsequian cosas unos a otros! y para colmo, ¡casi siempre son objetos que ni siquiera les hacen falta!

Te voy a hacer una pregunta: ¿A ti no te parecería extraño que al llegar tu cumpleaños todos tus amigos decidieran celebrarlo haciéndose regalos unos a otros y no te dieran nada a ti? ¡Pues es lo que me pasa a mi cada año!

Una vez alguien me dijo: "Es que tú no eres como los demás, a  ti no se te ve nunca. ¿Cómo es que te vamos a hacer regalos?" Ya te imaginas lo que le respondí.

Yo siempre he dicho: "Pues regala comida y ropa a los pobres, ayuda a quienes lo necesiten, ve a visitar a los enfermos". ¡Es como si me lo hubieras dado a mi personalmente".


Tu amigo
Jesús



martes, 16 de noviembre de 2021

A MIS HIJOS

 


Algún día, cuando mis hijos sean suficientemente grandes para entender la lógica que motiva a los padres, les diré:

Te amé lo suficiente, como para preguntarte a dónde ibas, con quién, y a qué hora regresarías a la casa.

Te ame lo suficiente, como para insistir en que ahorraras dinero para comprarte una bicicleta aunque nosotros tus padres pudiéramos comprarte una.

Te ame lo suficiente, como para callarme y dejarte descubrir que tu nuevo y mejor amigo era un patán.

Te ame lo suficiente, como para fastidiarte y estar encima de ti, durante dos horas, mientras arreglabas tu cuarto, un trabajo que me hubiese tomado a mí sólo 15 minutos.

Te ame lo suficiente, como para dejarte ver mi ira, desilusión y lágrimas en mis ojos. Los hijos también deben entender que no somos perfectas.

Te ame lo suficiente, como para dejar que asumieras la responsabilidad de tus acciones, aunque los castigos eran tan duros que rompían mi corazón.

Pero sobre todo, te ame lo suficiente, como para decirte que "NO" cuando sabía que me ibas a odiar por ello.

Esas fueron las batallas más difíciles para mí.

Pero estoy contento por haberlas ganado porque, al final, también las ganaste tú.

Y algún día, cuando tus hijos sean suficientemente grandes para entender la lógica que motiva a los padres, tu les dirás: 

"Te amé lo suficiente, como para hacer todo lo que hice por ti". 


viernes, 12 de noviembre de 2021

EL JOVEN RICO

 Jesús predicaba por el valle del río Jordán y las multitudes acudían a Él para escucharle. Un joven se le acercó, se puso de rodillas y le dijo: "Señor, ¡qué he de hacer para alcanzar la vida eterna?"

Jesús le dijo lo que el joven y nosotros hemos escuchado muchas veces: "Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos". El joven quiso que Jesús mismo se los recordase y le preguntó: "¿Cuáles?"

Jesús le respondió: "No matarás, no cometerás adulterio, no robarás, no levantarás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre y, amarás al prójimo como a ti mismo".

El joven dijo: "Eso lo he guardado desde mi juventud; ¿qué mas me falta?" Jesús fijó en él su mirada y le amó, como había hecho con los apóstoles antes de llamarlos a que le siguieran.

"Aún te falta una cosa", le dijo Jesús, "si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en los cielos, luego, ven y sígueme". Le estaba pidiendo que se convirtiera en uno de sus discípulos.

Al oír esto, el joven ser marchó abatido y entristecido porque era muy rico y tenía muchos bienes. Cuando se fue, Jesús les dijo a los apóstoles: "¡Qué difícil es que los que tienen riqueza entren en el Reino de los Cielos!"

Los apóstoles se quedaron sorprendidos de oírle. Jesús les dijo: "¡Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja que un rico entre en el Reino de Dios!" Los ojos de aguja eran puertas muy bajitas de las murallas de una ciudad.

Y del joven rico no supimos más, ni siquiera su nombre. Quien pudo ser uno de los discípulos y formar parte de la aventura de evangelizar el mundo, rechazó esta llamada por estar apegado a las cosas materiales.

           

sábado, 16 de octubre de 2021

ORACIÓN PARA FABRICAR UN MUNDO MEJOR

Hola Jesús, amigo, hermano y Dios mío.                                          Quiero darte las gracias
porque tú estás siempre conmigo,
dentro de mí, en mi corazón,
allí donde yo fabrico mis pensamientos,
allí donde yo fabrico mis palabras,
allí donde yo fabrico mis sueños,
allí donde yo fabrico mis acciones,
allí donde yo fabrico mis decisiones.

Y estás ahí, tan dentro de mi,
para decirme que me quieres,
que nunca me dejas solo,
que siempre me acompañas
en los momentos buenos y en los momentos malos,
como hacen los buenos amigos.

Cuando pienso cosas que me ayudan a ser mejor,
cuando digo palabras que ayudan,
cuando hago acciones que ayudan,
cuando sueño o decido cosas que me ayudan y ayudan a los demás,
es la mejor señal para saber que tú estás dirigiendo mi fábrica del corazón.

No dejes, Jesús,
que sea mi egoísmo el que dirija mi fábrica del corazón,
porque entonces seré de los que hacen que este mundo
sea tan injusto e insolidario.

Quiero Jesús,
que me ayudes a fabricar un mundo mejor
con mis pensamientos,
con mis palabras,
con mis acciones,
con  mis sueños y decisiones.

Aquí me tienes Jesús,
cuenta conmigo,
quiero que siempre seas tú el que dirija la fábrica de mi corazón.




domingo, 10 de octubre de 2021

EVANGELIO PARA ADULTOS

En aquel tiempo, de nuevo tomó Jesús la palabra y habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a los convidados a la boda, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados, encargándoles que les dijeran: “Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas, y todo está a punto. Venid a la boda.” 

Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios; los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados: “La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis, convidadlos a la boda.” Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. 

Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo: “Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?” El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros: “Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.” Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.»

                                                                                                   Mateo 22, 1-14




Conmueve ver el interés por parte de Dios de invitarnos a participar del banquete de las bodas del Hijo. Cuestiona, a su vez, la actitud de aquellos hombres que rechazan la invitación, mostrándose indiferentes ante u n corazón generoso que lea hace partícipes, de manera gratuita y desinteresada, de un gran don.

La primera cuestión es ver si hemos desairado la invitación y ver qué lugar ocupa Dios en nuestra vida.

El final de la parábola también nos resulta sugerente. Aquel hombre que se encuentra en la sala del banquete vestido de manera inapropiada, enseguida descubre su falta de cortesía, pues, ante la indicación del anfitrión, no abrió la boca. La hospitalidad oriental mandaba facilitar ropa adecuada para los invitados. No utilizarla suponía un desaire hacia quien la ofrecía. El Señor nos ofrece revestirnos de Cristo como propuesta segura a la hora de andar nuestro camino en la vida. Es lo propio de quien ha recibido el Bautismo convirtiéndose, por la acción de la gracia, en evangelizador. Quizá nosotros, como el invitado del Evangelio, preferimos revestirnos de nosotros mismos, manteniendo vigente al hombre viejo como expresión de un Bautismo olvidado y un Evangelio no asumido.

El Señor nos convida con una generosidad desbordada y desbordante. Ver si acudimos a su llamada y cómo lo estamos haciendo, supone para nosotros un gran reto. El Señor desea, de corazón, escogernos definitivamente. Por eso nos ha llamado.

                                                                             Carlos Escribano Subías

jueves, 7 de octubre de 2021

A ESO...

 


A eso de caer y volver a levantarte

De fracasar y volver a comenzar

De seguir un camino y tener que torcerlo

De encontrar el dolor y tener que afrontarlo

A eso, no le llames adversidad, llámale sabiduría.

A eso de sentir la mano de Dios y saberte impotente.

De fijarte una meta y tener que seguir otra

De huir de una prueba y tener que encararla

De planear un vuelo y tener que recortarlo

De aspirar y no poder, de querer y no saber

De avanzar y no llegar a eso, no le llames castigo, 

llámale enseñanza.

A eso, de pasar días juntos radiantes 

Días felices y días tristes

Días de soledad y días de compañía

A eso, no le llames rutina, llámale experiencia.

A eso , de que tus ojos miren y tus oídos oigan

y tu cerebro funcione y tus manos trabajen

y tu alma irradie, 

y tu sensibilidad sienta 

y tu corazón ame

A eso, no le llames poder humano, 

Llámale Milagro Divino .........

(Anónimo)


jueves, 9 de septiembre de 2021

EVANGELIO PARA ADULTOS

 En aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús había hecho callar a los saduceos, formaron grupo, y uno de ellos, que era experto en la Ley, le preguntó para ponerlo a prueba: "Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?" Él le dijo: "Amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser." Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: "Amarás a tu prójimo como a ti mismo." Estos dos mandamientos sostienen la Ley entera y los Profetas."

                                                                                                  Mateo 22:34-40




El cristianismo es la religión del amor, del amor sin límites, del amor hasta el extremo, del amor incluso a los enemigos. 

Dios manda al hombre amar. El hombre está hecho para amar, no puede vivir sin amor. Este amor tiene un solo origen, Dios, que es amor. Y se bifurca en doble dirección: amor a Dios y amor al prójimo.

Al mandamiento principal y primero, el del amor a Dios, se une el segundo que es semejante a él, el del amor al prójimo. Y si no amas a tu prójimo a quien ves, es mentira que ames a Dios a quien no ves.

                                                                                         Demetrio Fernández

miércoles, 1 de septiembre de 2021

EL PAPA FRANCISCO NOS INVITA A SEGUIR LA MISA PASO A PASO (Partes 1 y 2)

(MonteTabor)

Cuando un amigo te quiere, es normal que te invite a su casa y entonces habláis de vuestras cosas y coméis algo juntos. En la Misa,  es Jesús quien te invita a participar de su amistad en su casa: la iglesia. y hablas con El escuchando su Palabra y le respondes con tus oraciones. La comida llega cuando Jesús nos prepara el banquete de la Eucaristía y nos da el pan y el vino consagrados. La misa también se llama Eucaristía.

 La Santa Misa tiene cuatro partes básicas: 

1) Rito de Entrada        2) Liturgia de la Palabra        3) Liturgia Eucarística        4) Rito de despedida

LITURGIA es una palabra que significa SERVICIO.


RITO DE ENTRADA

La Santa Misa se inicia con el canto de entrada y la procesión que se dirige hacia el altar.

El Orden de la Procesión en Misas Solemnes y grandes fiestas es:
1. El Incensario y la Cruz Procesional.
2. Las dos velas.
3. El Evangelario, que contiene los 4 Evangelios.
4. El sacerdote.

La procesión de entrada es como nuestra vida en la Tierra que nos conduce al cielo. La persona que lleva el Evangelio y la que lleva la Cruz significan que Jesús mismo nos guía y acompaña hacia el Cielo; es genial ¿verdad?


* Saludo inicial
El sacerdote al llegar, besa el altar y se ubica en la sede. Hacemos con él la señal de la Cruz. Luego recibimos el saludo de Dios por medio del sacerdote:

"La gracia de nuestro Señor Jesucristo
el amor del Padre
y la comunión del Espíritu Santo
esté con todos vosotros"
                     Respondemos: "Y con tu espíritu"

El sacerdote besa el Altar porque representa a Jesús y allí vendrá Jesús Resucitado.

* Acto penitencial
Después del saludo viene el acto penitencial. Es el momento para pedir perdón a Dios por nuestras faltas y pecados. Los golpes suaves de pechos expresan nuestro arrepentimiento.

"Yo confieso ante Dios todopoderoso, y ante vosotros hermanos que he pecado de pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a Santa María siempre Virgen, a los ángeles y a vosotros, hermanos, que intercedáis por mi ante Dios, nuestro Señor".

Sacerdote: Señor, ten piedad...
Fieles: Señor, ten piedad.
Sacerdote: Cristo, ten piedad...
Fieles: Cristo, ten piedad.
Sacerdote: Señor, ten piedad...
Fieles: Cristo, ten piedad.

* Gloria a Dios en el Cielo
Rezamos o cantamos el GLORIA para alabar y dar gracias a Dios que es Padre, Hijo y Espíritu Santo. El Gloria recuerda el conto de los Ángeles la noche de Navidad. Se reza o canta en Domingos y Festivos menos en Adviento y Cuaresma.


"Gloria a Dios en el Cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios Rey celestial. Dios Padre Todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo. Señor Dios, cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica, tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque solo tú eres Santo, solo tú Señor, solo tú Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre". Amén.

Recuerda: Aunque no puedas verlo Jesús está presente en la misa con los Ángeles, la Virgen María y los Santos.

* Oración colecta
Después de rezar y cantar el GLORIA, el sacerdote hace la oración colecta diciendo OREMOS. Nos invita a rezar pidiendo y extiende las manos en señal de súplica. En silencio pide a Dios por tus necesidades y seres queridos y por los demás. Terminamos diciendo AMÉN.



LITURGIA DE LA PALABRA

La segunda parte de la Misa se llama LITURGIA de la PALABRA. ¡Dios te habla a ti y a todos por medio de su Palabra escrita en la Biblia! Se leen 2 Lecturas, se canta un Salmo y el sacerdote lee el Evangelio.

* Primera Lectura
Todos nos sentamos para escuchar la palabra de Dios que está en la Biblia.
La primera lectura casi siempre es tomada de la primera parte de la Biblia: El Antiguo Testamento.
De esta manera Dios nos habla a ti y a mi por medio de sus profetas.
Al acabar respondemos: TE ALABAMOS, SEÑOR.

* El Salmo
Cuando rezamos el Salmo, rezamos son las mismas palabras de Dios, ¿para qué? 
Para que aprendamos a hablar con Dios, pedirle, decirle tus cosas y lo que necesitas o te preocupa. ¡Dios es tu Padre y te escucha!
Las estrofas del salmo las canto o recita el salmista y la comunidad responde cantando o recitando la antífona del salmo.

* Segunda Lectura
La segunda lectura es tomada de la segunda parte de la Biblia: El nuevo Testamento.
Dios nos habla por medio de los Apóstoles.
Al acabar respondemos: TE ALABAMOS, SEÑOR.

*Canto antes del Evangelio
Después de la segunda lectura, todos nos ponemos en pie para escuchar el Santo Evangelio, pero antes aclamamos a Dios con el rezo o el canto del ALELUYA (Alegría, Alabad al Señor con alegría) excepto en Cuaresma.

*Evangelio
Al oír "Lectura del Santo Evangelio..." hacemos la señal de la cruz en la frente, la boca y el corazón pidiendo a Jesús que entendamos, anunciemos y vivamos su Evangelio.
"El Señor esté con vosotros"    --------------------- "Y con tu Espíritu"
"Lectura del Santo Evangelio según..." ----------- "Gloria a ti Señor"
"Palabra del Señor"  --------------------------------- "Gloria a ti Señor Jesús"

Después del EVANGELIO, todos se sientan y el sacerdote dice la HOMILÍA.
La homilía es el mensaje que comparte el sacerdote a toda la Iglesia explicando las lecturas.


*Credo
Terminada la homilía, todos decimos el CREDO, en él expresamos todo lo que creemos como cristianos y por lo que se nos reconoce.
Rezamos en pie para proclamar nuestra fe.

"Creo en Dios, Padre todopoderoso. Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la Iglesia católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados , la resurrección de la carne y la vida eterna". Amén.

*Oración de los fieles
En la oración de los fieles se pide por las necesidades de la Iglesia y de todo el mundo.
Señor te pedimos por...     Roguemos al Señor...           Te lo pedimos Señor


EL PAPA FRANCISCO NOS INVITA A SEGUIR LA MISA PASO A PASO (Partes 3 y 4)

 

(MonteTabor)


LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

Ahora entramos en la tercera parte de la misa. Esta parte se llama LITURGIA DE LA EUCARISTÍA. En ella se lleva a cabo la consagración del pan y el vino que se convertirán en el Cuerpo y la Sangre de Jesús.

* Presentación de las Ofrendas
Después que se termina la liturgia de la palabra, todo nos sentamos.
El sacerdote de pie ante el altar hace la presentación de los dones, mientras tanto se canta y se recogen los donativos.
Se recogen los donativos para ayudar a los más pobres, llevar comida a familias, medicinas a los enfermos y ancianos, gastos de la parroquia como luz, calefacción, Biblias y Catecismos...

Pasos de la presentación de las ofrendas (pan y vino)
1. El sacerdote presenta a Dios el pan, como fruto de nuestro trabajo. 
    "Bendito seas Señor Dios del universo por este pan..."



2. El sacerdote echa un poco de agua en el vino que está en el cáliz como signo de unión del cielo con 
    la tierra. 
    "Bendito seas Señor Dios del universo por este vino..."



3. El sacerdote presenta a Dios el vino como fruto de nuestro trabajo. Puedes ofrecer ahora a Jesús tus ofrendas como horas de estudio, deporte, alegrías, problemas, enfados, tus planes...
 

* Lavado de las manos
Una vez presentadas las ofrendas, el sacerdote se lava las manos diciendo las siguientes palabras: "Lava del todo mi delito Señor, limpia mi pecado". 
Representa su deseo de limpiar su corazón antes de tocar las cosas santas.

*Oración sobre las ofrendas
El sacerdote inicia la oración de las ofrendas con el siguiente diálogo y nos ponemos en pie para responder.
Sacerdote: "Orad hermanos para que este sacrificio mío y vuestro sea agradable a Dios Padre Todopoderoso"
Nosotros: "El Señor reciba de tus manos este sacrificio para alabanza y gloria de su nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia".

*Plegaria eucarística
Después del diálogo, el sacerdote hace la oración sobre las ofrendas (el pan y el vino: fruto de nuestro trabajo). Luego se inicia la plegaria eucarística con el Prefacio, oración para dar las gracias al Señor por enviarnos a su Hijo Jesús para salvarnos.
Sacerdote: "El Señor esté con vosotros"
Nosotros: "Y con tu espíritu"
Sacerdote: "Levantemos el corazón"
Nosotros: "Lo tenemos levantado hacia el Señor"
Sacerdote: "Demos gracias al Señor nuestro Dios".
Nosotros: "Es justo y necesario"
Sacerdote: "En verdad es justo y necesario, Señor darte gracias..."

Se termina el prefacio cantando el Santo:

"Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Universo.
Llenos están los cielos y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el Cielo
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el Cielo".

Tiene dos partes: primero es el canto que hacen los Ángeles al Señor, en el Cielo según vio el profeta Isaías (Is. 6): "Santo, Santo, Santo es el Señor..." Y a continuación "Hosanna en el Cielo, Bendito el que viene en nombre del Señor..." así aclamaron a Jesús el Domingo de Ramos (Mt. 21,9)

Después del SANTO fíjate que el sacerdote hace sombra con las manos sobre el pan y el vino: es la invocación del Espíritu Santo para que santifique el pan y el vino y se conviertan en el Cuerpo y Sangre de Jesús. A partir de este momento nos ponemos de rodillas.

"Santo eres en verdad, Señor, fuente de toda santidad; por eso te pedimos que santifiques estos dones con la efusión de tu Espíritu..."

Luego traza el signo de la Cruz sobre las ofrendas diciendo las siguientes palabras:
"... de manera que sean para nosotros Cuerpo y Sangre de Jesucristo, nuestro Señor"

Ahora el sacerdote continúa con la narración de la Última Cena, como nos pidió hacer Jesús. El sacerdote hace de Jesús y representa a Jesús en estas frases:
"Jesús, la noche que iba a ser entregado a su Pasión, voluntariamente aceptada, tomó pan, dándote gracias lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo: "TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL PORQUE ESTO ES MI CUERPO, QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS" (al decir esto, el pan se convierte en el Cuerpo de Jesús. Lo eleva para adorarlo y que miremos a Jesús).




"Del mismo modo acabada la cena, tomó e l cáliz y dándote gracias de nuevo lo pasó a sus discípulos, diciendo: "TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL, PORQUE ESTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROSY POR MUCHOS PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS. HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA". (Al decir esta frase, el vino se convierte en la sangre de Cristo, es decir, el mismo Jesús entero. Elevará el cáliz para adorar a Jesús y que le miremos).

El sacerdote muestra al pueblo el cuerpo y la sangre de Cristo diciendo:
"Éste es el sacramento de nuestra fe"
Respondemos: "Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección, ¡ven Señor, Jesús!"

Hace la invocación del Espíritu Santo sobre toda la unidad de la Iglesia: El Papa, los Obispos, los sacerdotes, diáconos y los feligreses vivos y muertos.
"Así pues Padre, al celebrar el memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo... te pedimos humildemente que el Espíritu Santo congregue en la unidad a cuantos participamos...
Acuérdate de tu Iglesia extendida por toda la tierra y con el Papa..."

El sacerdote finaliza la Plegaria Eucarística elevando el cuerpo y la sangre de Jesús y alabando y glorificando a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.
"Por Cristo, con Él y en Él, a ti, Dios padre omnipotente en la unidad el Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos..."
             Respondemos: "Amén" (que significa, así es)

* Rito de Comunión
El sacerdote dice: "Llenos de alegría por ser hijos de Dios, digamos confiadamente la oración que Cristo nos enseñó". Extiende sus manos y junto con la comunidad y junto a Jesús ya presente en el Altar hacemos la oración del Padre Nuestro.
"Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día:
persona nuestras ofensas, 
como también nosotros perdonamos 
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal".

Después del Padre Nuestro el sacerdote con las manos extendidas continúa con la siguiente oración:

"Líbranos Señor de todos los males, y concédenos la paz en nuestros días,
para que ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación, 
mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo".

A la cual los fieles responden:
"Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor".

*Saludo de la Paz
Llegado el momento del abrazo de la paz, el sacerdote con las manos extendidas continúa orando y al terminar junta las manos.



"Señor Jesucristo que dijiste a los apóstoles: "La paz os dejo, mi paz os doy",
no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia,
y conforme a tu palabra, concédele la paz y la unidad, 
Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos".

            Respondemos: "Amén"

En este momento el sacerdote hace el saludo oficial de la paz y luego pide que todos compartan la paz.
"La paz del Señor esté siempre con vosotros".
               Respondemos: "Y con tu espíritu"
El sacerdote dice: "Daos fraternalmente la paz".

Recuerda que en este momento solo debes dar el abrazo de la paz a las personas más cercanas. Las personas de tu lado, las que están adelante y detrás de ti, no podemos distraernos de la EUCARISTÍA.

*Fracción del pan
Durante la fracción del pan el sacerdote toma la Hostia o Forma Consagrada, la parte en dos y echa un pequeño trozo en el cáliz. Mientras sucede esto se canta o se dice la oración del Cordero de Dios.
"Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo,
danos la paz".

Luego el sacerdote eleva el  Cuerpo y la Sangre de Cristo y los muestra a la asamblea. 
"Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, dichosos los invitados a la cena del Señor".

La asamblea responde:
"Señor, no soy digno de que entres en mi casa. Pero una palabra tuya bastará para sanarme".

Inmediatamente después, el sacerdote coloca la Hostia o Forma consagrada y el Cáliz sobre el corporal. Luego comulga el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo, diciendo las siguientes palabras:
"El Cuerpo de Cristo me guarde para la vida eterna".
"La Sangre de Cristo me guarde para la vida eterna".

*Momento de Comunión
Luego, el sacerdote distribuye la comunión a la asamblea. Si hay más sacerdotes, entonces éstos deben ayudar a dar la comunión, pero también le pueden ayudar los ministros extraordinarios de la comunión. Los ministros extraordinarios de la comunión pueden ser los laicos y los religiosos.




La Iglesia Católica propone dos maneras de recibir la comunión: en la boca o en las manos.
Cuando de toque el turno el sacerdote te va a decir: "CUERPO DE CRISTO".
y tu debes contestar: "AMÉN". Luego recibes la Forma Consagrada.

Después de recibir la comunión debes regresar a tu sitio en silencio, ponerte a meditar o a cantar junto con el coro.

_ Purificación: Después de la comunión el sacerdote purifica (limpia) el cáliz y la patena cuidando que no quede ningún resto del Cuerpo y Sangre de Cristo. Luego se llevan los vasos sagrados a la mesita que está cerca del altar que se llama credencia.

Después de la purificación del cáliz y la patena, el sacerdote y  todos los fieles hacen un momento de meditación en silencio. El coro puede hacer un canto de alabanza o de bendición a Dios.

_Oración post-Comunión: Es la oración que se hace después de la comunión y meditación. Para ello el sacerdote se pone de pie y se ubica delante de la sede o cerca del altar dirigiéndose a la asamblea litúrgica. Todos nos ponemos de pie y oramos con él. 

"Oremos... Dios todopoderoso, no ceses de 
proteger con tu amor... Por Jesucristo nuestro Señor".
                     Respondemos: "Amén"



RITO DE CONCLUSIÓN

Hemos llegado a la parte final de la celebración de la Eucaristía.

*Bendición final
El sacerdote dialoga con el pueblo y da la bendición final. Es Dios mismo quien te bendice a través de él.
Sacerdote: "El Señor esté con vosotros"
Respondemos: "Y con tu espíritu"
Sacerdote: "La bendición de Dios Todopoderoso, 
Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros".
Respondemos: "Amén"

*Envío
El sacerdote hace el envío 
"Que la alegría del Señor sea vuestra fuerza. Podéis ir en paz".
       Respondemos: "Demos gracias a Dios"

El sacerdote besa el altar y luego se inicia la procesión de salida junto con el canto final.



Luego el sacerdote con los acólitos bajan del presbiterio y se ponen delante del altar, hacen la reverencia y salen en procesión.
Esperamos a que el sacerdote abandone la Iglesia para salir.

El papa Francisco nos dice: "Quiero recordarte que no olvides venir a la Iglesia para participar en la Misa todos los domingos.
Otra cosa importante que no debes olvidar es: "La Misa no termina en la Iglesia, la Misa continúa su celebración en cada acto de amor que tu vas haciendo cada día con tu familia, amigos y personas que necesitan de tu ayuda".