domingo, 2 de julio de 2023

JACOB Y ESAÚ

Isaac, el hijo de Abraham, conocido como el hijo de la Promesa, tuvo dos hijos. Uno fuerte y agreste, Esaú  y otro apacible y sencillo llamado Jacob. Esaú era el primogénito y, en aquella época, el primer hijo se llevaba todas las riquezas y bienes de la familia.

A Esaú le gustaba cazar y era el preferido de su padre Isaac, quien esperaba que cuando creciera se quedara con su herencia y todos sus bienes. En cambio, a Jacob le gustaba estar en su tienda y era el preferido de su madre Rebeca.

Un día Esaú llegó cansado del campo y sin haber cazado nada y vio que su hermano Jacob se estaba preparando un plato de lentejas. Jacob que era más listo que su hermano le dijo que le vendiera su primogenitura a cambio del plato de lentejas.

Esaú aceptó el trato y le dijo: "Estoy que me muerdo de hambre, ¡qué me importa la primogenitura?". Jacob le pidió que se lo prometiera. Esaú le prometió la primogenitura y se puso a comer el guiso de lentejas.

Cuando el padre de los dos, Isaac, se sintió anciano y se quedó ciego, llamó a Esaú para darle su bendición y entregarle todos sus bienes. Y le dijo: "Coge tu arco, caza algo y prepárame con ello algo de comer". Esaú no dijo nada de la promesa a Jacob.

Rebeca, la madre, lo escuchó todo y llamó a Jacob. Entre los dos prepararon un cabrito del rebaño que tenían y Rebeca vistió a Jacob con las ropas de su otro hijo Esaú. Como Esaú era peludo, Rebeca le puso a Jacob la piel de los cabritos en el cuello y los brazos.

Jacob le presentó a su padre el guiso de cabrito que había hecho. Isaac sospechaba algo y tocó a Jacob pero vio que era peludo y que las ropas eran las de Esaú. Isaac comió y después bendijo a Jacob y le hizo entrega de todos sus bienes.

Cuando Esaú volvió de cazar fue a pedir la bendición de su padre. Isaac se dio cuenta de que había sido engañado y se lo dijo a Esaú. Éste se enfadó pero ya era tarde, Jacob que también se llamó Israel fue el elegido y tuvo como descendencia un gran pueblo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario