¿DE DÓNDE VIENE LA NAVIDAD?

La Navidad viene de hace 2023 años, cuando nació el niño Jesús: ¡en el año 0! Es una fiesta religiosa, llena de alegría y tradiciones. Es la mejor excusa que tenemos al año para reunirnos con toda la familia y compartir buenos sentimientos, recibir muchos regalos y, sobre todo, pasarlo genial.

Desde hace miles de años la gente de los pueblos celebraba fiestas en diciembre para celebrar que ya había pasado lo más duro del invierno y que poco a poco regresaría el sol, los árboles darían sus frutos y los campos se recuperarían. En esas fiestas, la comida abundaba y se acompañaba con los primeros vinos de la cosecha anual.

Cuando en el año cero nació el Niño Jesús, todavía se celebraban ese tipo de fiestas en muchas partes del mundo. Entonces, ni sus humildes padres, que eran la Virgen María y San José, ni nadie, se podía imaginar que aquel día sería para siempre una de las fiestas más importantes del año. Pasaron tres siglos y medio hasta que los cristianos empezaron a conmemorar el nacimiento de Jesús: fue en el años 345 y fueron los cristianos los que empezaron a  repetirlo cada año. Esta fiesta se fue mezclando con las que se hacían al final del invierno. Y poco a poco, los hombres y mujeres cristianos comenzaron a celebrar la Navidad como una fiesta familiar, con los cánticos y os alimentos que eran típicos de aquellas fiestas del mes de diciembre.

EN EL PRIMER BELÉN DEL MUNDO LAS FIGURITAS ERAN PERSONAS El primer belén que se recuerda fue viviente y no porque las figuras de barro tuvieran vida de repente. Lo preparó un santo que se llamaba Francisco de Asís y que estaba en Italia cuando se le ocurrió la idea. Había ido a pasar la noche en una ermita situada en el interior de una cueva en los alrededores de Rieti. Era el mes de diciembre del año 1223 y el apóstol se sintió inspirado y decidió representar el nacimiento de Jesús. Entonces hizo una pequeña casa de paja con forma de portal, en la que puso un pesebre con un buey y un asno y llamó a un grupo de vecinos. Ellos representaron lo que pasó la noche en que nació Jesús. Como la idea gustó a mucha gente, se fue extendiendo. Los alfareros modelaban los personajes en barro y la gente los colocaba en sus casas cerca del fuego.

Y llegaron a España. Para que esta tradición llegara a España tuvieron que pasar unos cuantos siglos hasta que Carlos III trajo de Italia unos belenes y los dio a conocer en la Península Ibérica. En los hogares se extendió la presencia de pequeñas figuras de barro que representaban a la Virgen María, a San José, al Niño Jesús y a los protagonistas de las diferentes escenas que se sucedieron tras el nacimiento de Jesucristo: el anuncio a los pastores o las ofrendas que le hicieron al niño los Reyes Magos.

EL ÁRBOL es un gran personaje en las casas durante la Navidad. La costumbre de ponerlo existe en Europa pero es difícil averiguar donde comenzó a utilizarse como adorno. Tres son las leyendas más conocidas. 

Según la primera, un monje inglés llamado Winfrid viajó en el siglo VIII a Alemania para participar en una reunión de druidas que eran magos y adoraban a los robles. Para demostrar que los robles no tenían poder sobre los hombres cortó varios y, cuando los troncos cayeron al suelo, asomó un abeto entre ellos. 

La segunda historia cuenta que Persifal, uno de los caballeros de la mesa redonda del rey Arturo, estaba buscando el Santo Grial y encontró un árbol con luces que parecían estrellas.

La tercera leyenda cuenta que en una Navidad se quemó un bosque en un pueblo escandinavo y los lugareños decoraron el único árbol que quedó en pie.

El abeto es el árbol navideño que más se usa, aunque en otros sitios se utiliza el acebo, un arbusto sobre el que se pensaba que tenía poderes mágicos y que era garantía de buena suerte.

CORONA DE ADVIENTO. Era una costumbre anterior al nacimiento de Jesús. La corona se ponía sobre las mesas para conmemorar el regreso del sol. Luego, los cristianos la transformaron y le colocaron cuatro velas, que representaban los domingos anteriores al nacimiento de Jesús. Se va encendiendo una cada domingo hasta el día de Navidad.

EL ROSCÓN DE REYES. No se sabe bien donde empezaron a hacerlo, si en la antigua Roma o en los Países Bajos, pero si hay acuerdo en que era una rosca de pan dulce en la que se escondía un haba. 

DESDE LOS AÑOS 60 contamos en España con otro personaje que colabora con los Reyes Magos en el reparto de regalos. Ese ayudante es conocido con el nombre de PAPÁ NOEL, aunque su verdadero nombre es San Nicolás. Nació en la Edad Media y fue obispo de Myra, una ciudad turca en la que San Nicolás repartía regalos a los niños y a las mujeres que tenían problemas y eso le hizo ser muy apreciado. Después de su muerte reapareció como una tradición en Holanda, donde se contaba que la noche del 5 al 6 de enero un hombre recorría silenciosamente las calles repartiendo juguetes. Los holandeses llevaron su tradición a Estados Unidos. Este personaje se convirtió en el protagonista de las navidades norteamericanas, aunque allí se llama Santa Claus.