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domingo, 18 de mayo de 2025

CAÍN Y ABEL

Adán y Eva, después de ser expulsados del Paraíso, tuvieron dos hijos que alegraron su vida. El primero se llamó Caín y se hizo labrador y se dedicó  a cultivar la tierra. El segundo se llamó Abel y fue pastor y apacentaba el ganado.

Cuando Caín y Abel fueron mayores hicieron una ofrenda a Dios. Abel ofreció a Dios lo mejor de su ganado. Caín, en cambio, ofreció los frutos de la tierra, pero lo hizo a regañadientes y sin ofrecer lo mejor que tenía.

Dios agradeció a Abel su ofrenda porque además de darle lo mejor que tenía, lo había hecho con generosidad de corazón. La ofrenda de Caín no le gustó a Dios porque no lo había presentado con el corazón como su hermano Abel.

Caín se enfadó y andaba triste porque Dios no había aceptado su ofrenda. Dios habló entonces a Caín y le dijo: "Si obraras bien no andarías con la cabeza baja y triste". Caín envidiaba a su hermano que era bueno.

Un día Caín ke dijo a su hermano Abel que le acompañase al campo. Abel, confiado, acompañó a su hermano Caín. Y cuando estaban en el campo Caín se lanzó sobre Abel, su hermano y lo mató.

Después de que Caín cometiese la atrocidad de matar a su hermano, Dios le dijo: "Caín, ¿dónde está tu hermano Abel? Dios sabía que lo había matado, pero quería ver la dureza de Caín. Éste le contestó: "No sé. ¿Soy yo acaso el guarda de mi hermano?

Vio entonces Dios la maldad del corazón de Caín y se enfadó mucho con él: "¿Qué has hecho? ¿Cómo has podido matar a tu propio hermano? Y Dios maldijo a Caín porque había cometido el pecado de matar a su propio hermano.

Caín se alejó de la presencia de Dios, es decir, nunca más volvió a hablar con él y tuvo que andar como fugitivo por toda la tierra. Su nombre desde entonces recuerda que la envidia nos puede llevar incluso a lo peor, a matar a nuestro propio hermano...





sábado, 3 de mayo de 2025


Job era un buen hombre que amaba a Dios y guardaba sus mandamientos. Él y su esposa tenían diez hijos y tenía muchos rebaños de animales y una gran riqueza.

Dios permitió que se pusiera a prueba la fe de Job. Job experimentó cosas difíciles.

Un día, muchos de los animales de Job fueron robados. Más tarde, un fuego quemó todas las propiedades de Job y mató a todos sus sirvientes y los demás animales. Luego, una tormenta derribó la casa de un hijo de Job. Los hijos de Job estaban adentro y todos murieron. A Job y a su esposa no les quedaba nada más que su salud.

Job y su esposa estaban tristes. Lo perdieron todo, incluso a sus hijos, pero Job todavía tenía fe en Jehová. No culpaba al Señor por lo sucedido.

Entonces, Job enfermó gravemente; llagas dolorosas le cubrieron el cuerpo. Job y su esposa se preguntaban por qué estaban sucediendo todas esas cosas malas.

Dios habló a Job y le mostró la tierra, las estrellas y todos los seres vivientes. Le enseñó una lección importante. Todas las cosas fueron creadas para ayudar a los hijos del Padre Celestial a aprender acerca de Su Hijo Jesucristo y a seguirlo.

Job se arrepintió y le pidió a Dios que lo perdonara por dudar. Prometió confiar en Dios. Dios sabía que Job lo amaba. Sanó a Job y lo bendijo con más hijos y el doble de la riqueza que tenía antes.